Desigualdad y violencia de género: percepciones de chicos y chicas adolescentes de Zamora

Abstract

[ES]La violencia de género es en gran medida el resultado de los modelos de dominio sumisión procedentes del patriarcado, y que se manifiestan en la cultura androcéntrica en los centros escolares. Los modelos y manifestaciones sexistas se transmiten en todos los ámbitos de la vida social, los niños y las niñas incorporan los modelos y prácticas sexistas a edades muy tempranas, a los dos años las identidades de género están totalmente interiorizadas. Estas identidades masculinas o femeninas están cargadas de estereotipos que conforman las desigualdades existentes. La escuela reproduce de forma inconsciente modelos sexistas discriminatorios. La escuela como espacio social y socializador que es, puede y debe aportar estrategias para la resolución de conflictos de una manera adecuada, es decir, sin emplear la violencia. Es importante mencionar que los estudios realizados sobre la violencia, en general reflejan que la exposición a modelos violentos, especialmente durante la infancia y la adolescencia, conduce a la justificación de la violencia y que ambas condiciones incrementan considerablemente el riesgo de ejercerla.

La superación de estereotipos es una condición básica para prevenir la violencia de género, y, en esta línea de actuación, se llevan a cabo diferentes programas de educación para la igualdad. Las líneas expuestas hasta el momento reflejan la importancia de la educación para alcanzar la pretendida igualdad entre mujeres y hombres.

El presente proyecto surge de la inquietud por conocer mejor la situación actual, identificando la presencia de estereotipos y roles transmitidos de forma consciente o inconsciente por medio de la educación recibida, que siguen perpetuando la desigualdad entre mujeres y hombres, y que pueden incidir en el futuro en la persistencia de la violencia de género.

[EN]Gender violence is largely the result of the submission from domain models of patriarchy, and manifested in androcentric culture in schools. Models and sexist events are broadcast in all areas of social life, the children built models and sexist practices at an early age, at age two gender identities are fully internalized. These identities are male or female stereotypes loaded up existing inequalities. The school plays an unconscious sexist discriminatory models. The school as a social and socializing it can and should provide strategies for resolving conflicts in an appropriate manner, ie without using violence. It is noteworthy that studies on violence in general show that exposure to violent models, especially during childhood and adolescence leads to the justification of violence and that both conditions significantly increase the risk of exercise.

Overcoming stereotypes is a basic condition to prevent gender violence, and in this line of action, carried out various programs of education for equality. The lines set so far reflect the importance of education to achieve the alleged equality between women and men.

This project arose from the interest in understanding better the current situation, identifying the presence of stereotypes and roles transferred, consciously or unconsciously by the education received, that continue to perpetuate inequality between women and men, and that can affect the future in the persistence of gender violence.