Código ictus en Salamanca: Atlas clínico descriptivo y con minería de datos

Abstract

[ES] El cerebro humano es un ingenio perfecto. Es la estructura más compleja conocida, una maravilla funcional obra del poder creador y de la capacidad de evolución de la naturaleza, o de Dios, según creencias personales, más probablemente de los dos. Es un sistema fabuloso, sin comparación, con más de un billón de células totales y miles de millones de neuronas. Con un peso aproximado de un kilo y medio, el cerebro humano adulto es un órgano intrincado y complejo. Representa el 2% del total de la masa corporal, pero consume igual cantidad de energía que todo el músculo esquelético en reposo. Es una estructura muy sensible y delicada, que depende del suministro constante de sangre, mediante la que recibe el oxígeno y la glucosa, imprescindible para su funcionamiento. Al igual que los demás órganos, pero siendo el más sensible de todos, la escasez o falta de esas dos moléculas de la vida, sea cual sea la causa, puede llevar a daños cerebrales permanentes. Las palabras ictus y enfermedades cerebrovasculares (ACV) hacen referencia a cualquier trastorno de la circulación cerebral, generalmente de comienzo brusco, que provoca la interrupción de flujo sanguíneo a una parte del cerebro (isquemia cerebral) o una hemorragia por rotura de una vena o arteria. Es considerado código azul en emergencia sanitaria, al ser una patología tiempo- dependiente. ¡Tiempo es cerebro!, de ahí que el manejo de los pacientes que sufren un ictus esté perfectamente estandarizado por los servicios de salud, en un protocolo definido denominado código ictus. Basado en todas estas consideraciones previas, el objetivo de este trabajo de tesis doctoral se centra en analizar los códigos ictus isquémicos en la provincia de Salamanca, considerando las características clínicas de los pacientes atendidos entre los años 2016 al 2019, creando un auténtico atlas para su conocimiento. Consideraremos, de sumo interés y originalidad, además del manejo cualitativo de los aspectos clínicos y escalas de diagnóstico, realizar un estudio cuantitativo de los datos no sólo con técnicas descriptivas, sino con modernas técnicas de minería de datos. Mediante estástécnicas de manejo de grandes cantidades de datos, el objetivo será, tratar de obtener patrones de asociación, factores predictores, y de manejo de la patología, con el fin de intentar que disminuya de manera significativa, la morbimortalidad, en pacientes con ictus isquémicos, así como los costes sociosanitarios de los pacientes afectados y las hospitalizaciones prolongadas.