Programación didáctica de historia: propuesta para el segundo curso de Educación Secundaria Obligatoria

Abstract

[ES]En el presente Trabajo Fin de Máster titulado Programación didáctica de Historia. Propuesta para el segundo curso de Educación Secundaria Obligatoria, se va a desarrollar una programación didáctica para la asignatura de Ciencias Sociales. El motivo de la elección de una programación didáctica es la importancia de este documento en el desarrollo de la práctica docente, pues como se contempla en el artículo 18 de la sección 3ª del Capítulo II de la Orden EDU/362/2015, de 4 de mayo, por la que se establece el currículo y se regula la implantación, evaluación y desarrollo de la educación secundaria obligatoria en la Comunidad de Castilla y León, “la programación didáctica es el instrumento específico de planificación, desarrollo y evaluación de cada una de las materias y en ella se concretarán los distintos elementos del currículo para el desarrollo de la actividad docente en cada curso”. Por ello, la programación didáctica es una herramienta fundamental en el proceso de enseñanza-aprendizaje, estableciéndose como el nivel intermedio entre el currículo y la acción educativa, que además garantiza que la enseñanza no se desarrolle de forma arbitraria y que se logra una educación de calidad. Como instrumento de planificación de la actividad en el aula, nuestra programación didáctica persigue atenerse al principio de adecuación (a la legislación vigente, al contexto del centro educativo y a las características del alumnado), al principio de concreción (concretando el plan de actuación), al principio de flexibilidad (abierta a posibles cambios necesarios en el proceso de enseñanza-aprendizaje) y al principio de viabilidad (resultando aplicable plenamente sin dejar de mantener un enfoque realista). Por lo tanto, la programación didáctica posee una enorme relevancia en el proceso de enseñanza-aprendizaje, pues a través de ella se planifica dicho proceso, se promueve la reflexión sobre la propia práctica docente y se facilita la implicación de los alumnos en su propio proceso de aprendizaje, implicando a los tres agentes de la educación: profesorado, alumnado y sociedad.